El emerger de la piel

Brasas ardientes a la sombra del inmenso árbol de frutos agrios y su roja espina creciente que adolece desorientada en su escultura de caucho, rastremos las pieles de nuestros antepasados y ese olor a tierra humedecida antes que todo sea tarde, bajando por la colina una profunda polusión de los sinsentidos me asegura que el sol está bajando ansioso su telón.

Cerdos en la cabina de un Boeing

Mi cerdo me habla, tú cerdo no escucha, mi cerdo se puso de acuerdo con el tuyo, tú cerdo ahora está alegre, su aliento huele a plástico, le gusta estropear mi césped. Deberíamos eliminar al cerdo cuando ya no quede césped...

Los pasmados

Con sus cautelas que no son tan frescas los pasmados se presentan esta noche en el teatro “La Puerca”, puntuales y marinados por el nuevo sabor actúan “La Siesta”, se tuercen y retozan dentro de sus jaulas rasgadas, pero saben bien, lo olfatean a desgano que el dolor te sabe esperar. Hoy duermen sin recuerdos en este chiquero enmarañado. 

Erótica blues de la accidental colina

Desearía estar completamente sordo, no escuchar más esta protervia letrina, no ver más allá de la sombra del sol y rasgarme con desgano los gritos de tus títeres decapitados... Vegetable happiness... si tan solo pudiese nadar dentro de tus ojos carrusel. Crees? Vos realmente crees sin avergonzarte? Te espero, mi vieja sádica esperanza bajo la línea de flotabilidad en la próxima inundación.